Las ferias patronales son celebraciones que suelen remontarse a tiempos ancestrales. Son una mezcla perfecta entre religiosidad popular y manifestaciones artísticas, donde las procesiones, fuegos artificiales, juegos tradicionales y mercados gastronómicos conforman un mosaico de colores y sonidos. Al asistir a una feria patronal, el viajero tiene la oportunidad de comprender la devoción y el sentido de pertenencia que caracteriza a la comunidad, además de disfrutar de la calidez de sus habitantes. Esta experiencia involucra tanto lo espiritual como lo festivo, ofreciendo una visión completa de la vida local.